Benito Zambrano y el arte de contar historias

Benito Zambrano y el arte de contar historias
Santo Domingo, República Dominicana, 20/08/2012

E l salón estaba vacío, salvo por el eco de los festejos en la sala congruente y una mirada cargada del deseo de intercambiar anécdotas y conocer más a fondo otras realidades. Se trata de la inquietud de una mente que vive para crear historias, un individuo listo para hablar sobre los detalles de un soñador que convierte sus fantasías en realidades para las masas. Sí, Benito Zambrano estaba algo cansado pero, como siempre, también estaba dispuesto a establecer un diálogo y compartir ideas.

La primera vez que este reconocido cineasta visitó la República Dominicana fue para participar en la más reciente entrega de la Muestra Internacional de Cine de Santo Domingo con el estreno de “La voz dormida”.

Había una vez…

El número tres en sí no suena como una cantidad muy impresionante, pero en base al impacto causado por sus tres filmes (“Solas”, “Habana Blues” y “La voz dormida”), Benito Zambrano ha dejado una marca indiscutible en el mundo del cine. Como director y guionista de sus obras, para Zambrano la esencia del oficio de crear una película se basa en un simple hecho: contar una buena historia. “Para mí el asunto está en las historias que cuentas. Un cine que no lo llenas de contenido será un cine vacío que al final no va a transmitir nada. Sin los guiones y sin las buenas historias es muy difícil hacer algo que merezca la pena”, exclama el creador.

En aquella ocasión también impartió un seminario de dirección de cine y técnicas de guión a los estudiantes de la Escuela de Cine de la UASD. No pasaría mucho tiempo antes de que su presencia se volviera a sentir en el país.

Días de cine
Recientemente,. Zambrano regresó a Santo Domingo y desarrolló una intensa agenda de actividades que incluyó un taller creativo con directores, guionistas y actores dominicanos,  organizado conjuntamente por la Embajada de España en Santo Domingo y el Instituto Global de Multimedia de FUNGLODE.

En sus diversos encuentros con el público, sobresalió el tema de la Ley de Cine. “Las leyes están ahí y hay que utilizarlas hasta el máximo”, exclama Zambrano. “Existe la posibilidad de que se produzca una buena cantidad de películas, pero se debe intentar que el cine sea más que un negocio. Ahí está el compromiso y la responsabilidad de los cineastas: intentar hacer películas que puedan ayudar a hacer una República Dominicana culturalmente más rica».

Nuevos puertos
El final del taller se celebró con una conversatorio entre Zambrano y crítico dominicano Félix Manuel Lora, y con la participación del director general de cine, Ellis Pérez y otros profesionales del cine dominicano. El público presente tuvo la oportunidad de interactuar con el director y tratar diversos temas relacionados al cine, como la vigencia de un guión, qué tomar en cuenta cuando se realiza el casting de una película, la edición, entre otros.

La noche aún no terminaba para Zambrano, era su último día en la isla pero aún le queda mucho por hacer. “Sí, quiero mantener abierto aquí un espacio, una posibilidad por los amigos que he descubierto”, dice sobre la posibilidad de volver a República Dominicana.

“Lo bonito es encontrar nuevos puertos donde poder volver”. Respira profundo, se despide cordialmente y continua su camino, perdiéndose entre el público. La labor de un soñador nunca termina.

Joan Prats/7dias.com.do