Los retos presentes y futuros de la República Dominicana L a juventud dominicana merece mejores oportunidades. Es inaceptable ver a tantos jóvenes desempleados, muchos con títulos técnicos y universitarios, y otros que no continuaron sus estudios porque tuvieron que trabajar, abrumados por la pobreza. Según información del Observatorio Juvenil y Políticas Públicas, el índice de desempleo urbano juvenil era de 10.7% y en la actualidad alcanza 14.7%, el más alto de todos los países evaluados del área del Caribe. Es también inaceptable que precisamente por falta de apoyo del Estado miles de jóvenes, desesperados y por falta de orientación, caigan en la delincuencia, la prostitución y en el consumo de drogas, lacra social que afecta a gran parte de la sociedad dominicana. Pero no para crear una nueva burocracia, digo yo, sino para buscar una educación de calidad, que incluya una mejor preparación de los profesores, además de estimularlos con salarios decentes. Y haciéndoles cumplir rigurosamente las tareas para cuyo cumplimiento fueron contratados. No soy experto en estos temas, pero me parece que el Gobierno podría otorgar incentivos especiales—más de los que tienen—a empresarios establecidos para que fomenten la creación de nuevos empleos. En el Gran Pacto Social propuesto por Medina en su discurso de toma de posesión, debería consignarse que los empresarios de las grandes ciudades, entre ellas la capital de la República, no se opondrán a la creación de nuevas empresas en la frontera con Haití, bajo el argumento de que las existentes gozan de mayores incentivos estatales. Si no es por envidia, ellos podrían hacer lo mismo en la frontera y sencillamente someterse a las reglas de competencia. Las estadísticas son impresionantes: un 29.70% de los jóvenes dominicanos entre 15 y 24 años carecende empleos y la cifra se duplica entre las mujeres, lo que indica que ese segmento poblacional sigue siendo el grupo más afectado, con tasas de desempleo que casi duplican el promedio nacional en la mayoría de los países. Países como Perú, Venezuela, Chile, Argentina, Bolivia, Colombia y México han visto aumentar sus tasas de desempleo juvenil en un uno por ciento, sin embargo, ninguno alcanzó el 4%, como República Dominicana. La Comisión Económica para América Latina (CEPAL) dice que el porcentaje de jóvenes que no estudiaba ni trabajaba en 2010 era de 19% y amplía el tramo de edad entre 12 a 35 años. En términos generales, la República Dominicana tiene una tasa de desempleo de 14.3 % y una desocupación de 4.5%, de acuerdo a las estadísticas del Banco Central. De las personas sin empleo, las mujeres representan un 21.9% y los hombres 9.7%. No confío en esas cifras, pues considero que el desempleo es mucho mayor. El anterior ministro de Trabajo, Francisco Domínguez Brito, hoy Procurador General de la República, consideró en su momento que hay que poner énfasis en la capacitación de la juventud para que no pierdan las oportunidades de empleo y puedan desarrollarse «El Ministerio de Trabajo está empeñado en buscar soluciones concretas, y establecer propuestas que puedan generar plazas de trabajo para esa importante población de la sociedad», dijo Brito. Habría que ver si su sucesora, la experta en derecho laboral Maritza Hernández, impulsaráun proyecto que se ejecuta en el país desde hace diez años sobre capacitación que se denomina «Juventud y empleo», dirigido por el Ministerio de Trabajo con apoyo del Banco Mundial (BM) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que busca fomentar la inserción de jóvenes en el mercado laboral formal. La situación de las muchachas jóvenes fuente de preocupación, pues se estima 35, 000 de ellas de menos de 19 años se inclinan hacia la prostitución para sobrevivir, de acuerdo a una ONG dominicana que trabaja para terminar la prostitución infantil en nuestro país. Un estudio llevado a cabo en el 2001 por Pro-familia dice que muchos padres saben que sus hijas son prostitutas, pero en algunos casos las familias se hacen «de la vista gorda» para mejorar su pobreza. Nuestro país, además, se conoce por ser un destino de turismo sexual. Con bastante frecuencia las autoridades anuncia la detención de ciudadanos extranjeros acusados de prostituir menores, tantos niños como niñas. Jaime de la Rosa, director de una organización gubernamental del país contra el SIDA dice que nuestro país tiene una debilidad fuerte en proteger a sus niños, incluyendo protegerlos del SIDA.Para colmo, según una información producida por las Naciones Unidas, 30, 000 niños haitianos son contrabandeados anualmente por la frontera con Haití para ser prostituidos. (La cifra me parece absolutamente exagerada) La República Dominicana atrae turistas buscando sexo. Vienen de muchas nacionalidades diferentes. Entre estos hay pedófilos, que tienen un especial interés sexual en niños. Otros son lo que es considerado «turistas sexuales oportunistas» que viajan buscando sexo barato y anónimo con muchas parejas. Estos usan adolescentes (ya sean varones o hembras) si están disponibles. Estos hombres tienden a quedarse en hoteles más pequeños y de acomodación privada, en hoteles con comunidades grandes de extranjeros como Sosúa, Boca Chica y Santo Domingo. En algunas áreas de la República Dominicana 25 porciento de las jovencitas en prostitución habían sido violadas. Los bajos niveles de confianza y auto estima, junto a la pérdida de la virginidad y exposición a la violencia, deja a estas muchachas de manera particularmentevulnerables a entrar en prostitución. Los embarazos entre adolescentes en la República Dominicana es alto con un porcentaje de 13.3% de jóvenes entre 15-19 años convirtiéndose en madres y 403 bebés naciendo a jovencitas de menos de 15 años. Con pocas oportunidades de ganar dinero, estas chicas entran en la prostitución. UNICEF encontró que el 48-60 % de las jóvenes en prostitución tenía hijos y que la mayoría de estas vienen del sector más pobre de la sociedad, con estructuras familiares débiles. Bibliografía: Por: Por Santiago Estrella Veloz/Especial para DiarioDigitalRD | ||
Las ultimas noticias/novedades de lo que acontece con los Dominicanos en las Grandes Ligas durante toda la temporada 2024